Montar un bar, abrir una cafetería o lanzarse al mundo de los negocios con un restaurante es, para muchos, un sueño. La hostelería tiene ese encanto de lo cercano, lo social, lo creativo, pero también es uno de los sectores más exigentes y competitivos que existen. Por eso, antes de ir a por todas, conviene tener bien claro qué implica de verdad iniciar un negocio en hostelería.
Aquí no hay fórmulas mágicas, pero sí algunos consejos que pueden ayudarte a empezar con buen pie y, sobre todo, con los ojos bien abiertos.
¿Quieres abrir un bar o restaurante? Empieza con los pies en la tierra
Hay algo que muchos pasan por alto, y es que abrir un bar o un restaurante no es solo ponerle un nombre bonito y servir platos ricos. Antes de pensar en la carta, hay que pensar en el plan. ¿Tienes claro a qué público te vas a dirigir? ¿Conoces la zona en la que quieres montar el local? ¿Has hecho números reales?
Aquí es donde muchos proyectos naufragan antes incluso de arrancar, porque no se trata solo de tener una buena idea, sino de saber si esa idea encaja con el mercado, si es rentable, y si puedes llevarla a cabo con los recursos que tienes.
Es necesario antes de emprender hacer un estudio sencillo, pero claro: qué hay en la zona, qué precios se manejan, qué están haciendo bien (o mal) tus futuros competidores. Y, sobre todo, plantéate si estás dispuesto a implicarte al 100%, porque este sector no entiende de medias tintas.
La asesoría para hostelería es tu mejor aliada
Una de las mejores decisiones que puedes tomar cuando te planteas iniciar negocio en hostelería es buscar una buena asesoría para emprendedores y que además esté especializada en este sector. ¿Por qué? Porque vas a enfrentarte a mil detalles técnicos: licencias, normativas, trámites fiscales, contratos, alta de actividad que desconoces y ellos manejan a la perfección.
En este sentido, una asesoría para hostelería te ahorrará quebraderos de cabeza y, lo más importante, te ayudará a no cometer errores que te puedan costar caro más adelante.
Además, muchas de estas asesorías no solo te acompañan en la parte legal, sino también en la elaboración del plan de negocio, en la gestión del personal o en la optimización de costes. No es un gasto, es una inversión en tranquilidad y la mejor forma de asegurar un buen comienzo.
Asociarte es avanzar acompañado
Cuando empiezas, cualquier consejo vale oro. Y si ese consejo viene de gente con experiencia, mejor todavía. Por eso, formar parte de una Asociación de hostelería es una estrategia muy inteligente.
No es solo una cuestión de sentirse respaldado. Estas asociaciones ofrecen formación actualizada, apoyo legal, información sobre ayudas, descuentos con proveedores… Y lo más valioso: te conectan con otros profesionales del sector, porque compartir experiencias y aprender de otros que ya han pasado por lo mismo es, muchas veces, lo que te salva de cometer errores innecesarios.
Consejos que nadie te cuenta
Aquí van algunos consejos que salen del día a día real de quienes han emprendido en hostelería.
- La primera impresión lo es todo. Cuida el local, el trato y los detalles.
- Aprende a leer las cifras. No sirve de nada que llenes mesas si al final no cierras en positivo.
- Invierte en un buen equipo humano. La gente no solo viene por lo que come, sino por cómo la tratan.
- La comunicación es clave. Una cuenta de Instagram bien llevada puede traerte más clientes que cualquier cartel.
- Al cliente, al equipo, a los que saben más que tú. No hay aprendizaje más útil.
Por último, si estás pensando en abrir un restaurante, un bar o una cafetería, ve paso a paso. Rodéate de gente que te acompañe pese a las dificultades, asesórate bien y no tengas miedo de pedir ayuda. Empezar en este sector no es sencillo, pero con visión, constancia y una buena red de apoyo, se conseguirá triunfar y conseguir un negocio rentable para toda la vida.